lunes, 11 de enero de 2016

“Sabios que no saben nada"

Hoy no es un día normal; hoy ando bajo la lluvia, como muchas veces antes, pero todo es diferente.
Los besos al portador y las sonrisas pasajeras ya no me calman.
Desde hace un tiempo la rutina es muy rutina, y ahoga, asfixia sin dificultad cada respiro.
Lamento, respiro, despierto, respiro, huelo el humo que me trae el respiro y vuelvo a respirar. Y así respirar dejó de tener ningún sentido.

Y se despereza el sol; y bosteza el cielo, otro trueno. Y yo me desperezo y me cuelgo mi mochila de ansiedad; y bostezan mis heridas, se vuelven a abrir, necesitan respirar. Pero hoy nadie las cura, nadie las cierra.

Hoy es un día diferente, me dan igual las sirenas, y las banderas, como siempre pero un poco más.
Hoy es un día diferente, hoy lo poco que me queda se vuelve polvo en mis manos.
La luna ya no me baila y nadie le toca las palmas.
Ya no le canto al sol, él tampoco me canta a mí, ni sus pájaros, ni su luz.

Hoy es un día diferente, la esperanza se la llevó el vaivén del tiempo, que ya va pero nunca viene.

Hoy es un día diferente, y solo espero que un día así nunca sea un día normal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario