martes, 29 de noviembre de 2016

Luces

Sentado en mi terraza como siempre y como nunca, tan libre, tan triste y tan solo que asusta; el viento golpea la persiana contra la ventana y yo ya sé que nada podrá ser igual.

Mienten las esquinas cuando dicen que me quieren, ya saben de sobra que mi calor es efímero y que cuando me atormenta lo que algunos llaman espíritu no están ahí para verme caer. Ahora brindo por la luna, que mientras me quita salud me da vida, y sufro no haber sido peor en todo mientras todo ardía.

Ahora ya solo ardo yo cada vez que pienso en tu triste silueta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario